Allá afuera hay un mundo que causa llanto.
Te amenazan con sobrepoblación, apocalipsis, extraterrestres
y espantos;
con cambios de clima, tormentas y sexuales asaltos.
Mire usted, que predica tanta moral,
lo suyo es solo es depravación disfrazada.
Yo no sé en qué va esto acabar
cuando llueva sobre el agua mojada,
no me alabe tanto señora, quédese para usted tanta envidia.
Su exagerada delicadeza de flor no es un hecho, es usted la esencia brutal;
yo mejor le concedo el derecho, pues le cabe de forma total.
Dile si a la eutanasia, dile no a la pena de muerte.
Oye, pedacito de universo durmiente, si no has nacido mejor para ti.
Nadie sabe qué es la vida, menos saben lo que es la muerte.
Creemos que sabemos sin saber lo que creemos.
Alégrate siempre, alégrate aunque creas que estés muerto.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario